La cantante de ópera Eva Urbanová será invitada al espectáculo de Jan Kraus. Si bien es conocida por su pasión por la ópera, sorprende con su amor por los conciertos de rock, que describe como una cuestión del corazón. Eva vive en el campo, donde puede practicar su canto sin molestar a nadie.

Además de sus aficiones musicales, Eva Urbanová es una amante de los animales y en casa tiene dos loros parlantes llamados Rozárka y Pepíček. Ella menciona con humor que en su testamento se asegurará de que alguien los cuide y reciba una recompensa, y bromea diciendo que ya está criando «criadores sustitutos» en su familia.

El éxito de Urbanová como cantante requiere gran disciplina y trabajo duro, incluido levantarse temprano para preparar su voz para las actuaciones. Ella admite que incluso con 35 años de experiencia, todavía hay partes desafiantes que la ponen nerviosa. Recuerda un incidente en el que un colega tuvo problemas con un aria difícil durante una actuación en vivo, y enfatiza la importancia de manejar esos momentos con cuidado.

Eva Urbanová comparte su viaje único desde estudiar química farmacéutica hasta trabajar en el centro de computación de una compañía ferroviaria, lo que finalmente la llevó a una exitosa carrera como cantante de ópera, incluidas actuaciones en la Metropolitan Opera.