
La modelo Hana Mašlíková se sometió a su tercera operación de pecho por motivos estéticos.
El procedimiento implicó corregir la flacidez y realizar ligeros ajustes en los rellenos con su propia grasa para mantener la simetría. A pesar de que no hubo complicaciones durante la cirugía, necesitará algo de tiempo para recuperarse, lo que significa abandonar temporalmente su querida rutina de culturismo.
Esta no fue su primera cirugía de seno; El aumento inicial se realizó hace dieciséis años, con una reintervención posterior en 2018 debido a problemas con los implantes. A pesar de su satisfacción con los resultados, Mašlíková está decepcionada por tener que tomar un descanso de su rutina habitual en el gimnasio, que considera una adicción.