
Los talibanes informaron de un aumento en el número de ciudadanos afganos que llegaron a los cruces fronterizos de Pakistán a medida que se acercaba la fecha límite para que los inmigrantes indocumentados abandonaran Pakistán. Alrededor de 8.500 personas cruzaron la frontera de Torkham, y miles más cruzaron por varios puntos. La afluencia provocó largas colas y condiciones difíciles para quienes esperaban registrarse, con quejas sobre instalaciones insuficientes de alojamiento, agua y alimentos.
El ultimátum de Pakistán a los inmigrantes indocumentados ha provocado un retorno masivo de afganos a su país de origen, con casi 59.780 regresando hasta el 15 de octubre. La porosa frontera entre Pakistán y Afganistán, que abarca unos 2.600 kilómetros, ha visto cruces diarios sin visas. Vencido el plazo, las autoridades paquistaníes exigirán visados para entrar, pese a la presencia de 1,4 millones de refugiados afganos registrados en el país, que carece de legislación específica para esta población.