Ginebra, 19 may (EFE) – La Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió este viernes sobre un aumento significativo de los brotes de cólera en todo el mundo este año, principalmente en el este y sur de África, con altas tasas de mortalidad.

Entre enero y mediados de mayo, 24 países experimentaron nuevos brotes de cólera y más de mil millones de personas en 43 países estaban en riesgo de epidemias, según Henry Gray, Director de Respuesta Global al Cólera de la OMS. Los casos más graves hasta ahora se encuentran en Mozambique y Malawi, donde se espera que el cólera afecte a 90.000 personas en los primeros tres meses de 2023, coincidiendo con graves inundaciones.

Burundi, Camerún, la República Democrática del Congo, Etiopía, Kenia, Malawi, Mozambique, Somalia, Siria, Zambia y Zimbabue se encuentran en un estado de «grave crisis». “Necesitamos prepararnos para más y más casos”, advirtió el experto.

La falta de acceso a agua potable y saneamiento básico es una de las principales causas de la epidemia de cólera, que se ve agravada por el desplazamiento de población derivado de los conflictos. «El problema aquí es el acceso al agua, el saneamiento y la dignidad humana. Las vacunas pueden ayudar a detener de manera proactiva las cadenas de infección, pero la solución definitiva es el acceso rápido al agua y al saneamiento», dijo Gray. La OMS afirma que los recursos para hacer frente a la situación están muy por debajo de lo que se necesita, y hay escasez de vacunas que solo son suficientes para inmunizar parcialmente a las comunidades de alto riesgo.

Según la organización, solo se dispone de 8 millones de dosis de los 18 millones requeridos, por lo que se suspendieron las actividades de prevención en zonas de alto riesgo. Además, la OMS se vio obligada a reducir el régimen de dos dosis a una dosis para proteger a más personas con mayor riesgo de muerte, como los niños, aunque por un período más corto.

“El cólera mata rápidamente, por lo que debemos responder rápidamente para salvar vidas”, dijo a los medios Jerome Pfaffman Zambruni, jefe de salud pública y emergencias de Unicef. Para abordar esto, la Organización Mundial de la Salud y UNICEF han propuesto un plan anual conjunto para combatir la enfermedad, que cubriría operaciones en 40 países y requeriría más de 600 millones de dólares estadounidenses. EFE.