En 2024, están programadas elecciones en 70 países, que en conjunto representan más de la mitad de la población mundial. En particular, las amenazas a la democracia están aumentando en todo el mundo, como se destaca en un informe del Instituto para la Democracia y la Asistencia Electoral. Los desafíos incluyen cuestiones como procesos electorales comprometidos, independencia judicial comprometida y restricciones a la libertad de expresión y reunión.

Las próximas elecciones clave incluyen las elecciones al Parlamento Europeo en junio, las elecciones presidenciales de Estados Unidos en noviembre y las elecciones federales de Rusia en marzo, donde Vladimir Putin busca la reelección en medio del conflicto en curso en Ucrania. Además, las elecciones en Venezuela carecen de una fecha fija y la legitimidad de las elecciones de febrero en El Salvador está en duda debido a la candidatura del presidente Nayib Bukele a un segundo mandato consecutivo.

Las elecciones de junio en México cuentan con dos candidatas, mientras que India, con su enorme población, celebrará elecciones en abril y mayo, y el primer ministro Narendra Modi aspira a un tercer mandato. Además, Portugal y Bélgica presenciarán renovaciones parlamentarias en marzo y junio, respectivamente. El contexto más amplio de estas elecciones es el declive global de los valores e instituciones democráticos.