Beyoncé, un ícono musical de renombre mundial y una de las artistas femeninas más exitosas, es celebrada por sus grandiosos y elaborados conciertos. Sin embargo, el alto costo de sus boletos no sorprende a sus fanáticos. Lo que sí fue una sorpresa fue su reciente oferta de asientos detrás del escenario «de ganga» a un precio asombroso de 3.200 coronas, donde el público solo podía ver la mitad de la actuación de la cantante. Este movimiento ha dejado a los fanáticos sintiéndose decepcionados y considerándolo una broma desagradable.

Muchos fanáticos expresaron su descontento en las redes sociales y señalaron que pagar tanto por un asiento detrás del escenario solo para escuchar el concierto parecía absurdo. Algunos incluso comentaron que simplemente podrían pararse fuera del estadio de forma gratuita para disfrutar de la música si ese fuera el caso.

A pesar del notable éxito de su gira Renaissance en Europa y Norteamérica, y la impecable producción de sus conciertos, los precios desorbitados de las entradas han sido motivo de preocupación y críticas entre sus seguidores.